La Huerta y Vos recuerda  el día de la Madre Tierra

Este 22 de abril se recuerda a nivel mundial el día de nuestro planeta, la Madre Tierra.

Quienes practicamos la huerta orgánica como filosofía de vida, sabemos que la vida en nuestro planeta, está organizada en sistemas o  subsistemas, y  en ellos hay una perfecta relación entre los animales, las plantas y el medio que los rodea. Todos esos subsistemas se interrelacionan entre sí, formando parte del gran sistema que es el planeta.

La huerta orgánica es un agroecosistema, realizado por nosotros, observando y respetando los ciclos de la naturaleza.

A lo largo de la historia, el papel  que han tenido los seres humanos en el entorno medioambiental  del planeta ha cambiado.

En un principio las alteraciones sobre los distintos ecosistemas eran mínimas (ecosistemas estables). Con el tiempo la especie humana fue  modificando el entorno natural, provocando graves alteraciones en los diferentes ecosistemas (pérdida de biodiversidad, deforestación, contaminación del aire, suelos y cursos de agua).

Los  ecosistemas terrestres y marinos cumplen un papel fundamental en la regulación del clima, por ejemplo, ellos absorben la mitad de las emisiones de CO 2  que genera la humanidad, por lo que cualquier alteración en los mismos afecta la capacidad de regulación del clima, lo que provoca el cambio climático. 

Si bien existen muchos factores naturales que contribuyen  al cambio climático (actividad volcánica, corrientes oceánicas, movimiento de las placas tectónicas, variaciones en la órbita terrestre, variaciones en la energía emitida por el sol), para muchos científicos, el calentamiento global asociado al cambio climático aumenta la cantidad de eventos extremos como inundaciones, sequías, tornados, huracanes.

Según los científicos del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), los desastres naturales vinculados con eventos meteorológicos extremos coinciden con un aumento generalizado de la temperatura de la Tierra.

Los invitamos a reflexionar:

Actualmente en Uruguay,  eventos como inundaciones, períodos prolongados de sequía, tornados, son cada vez más frecuentes.

Desde nuestro  espacio  La huerta y vos, nos surgió la necesidad de brindar tributo a nuestro planeta en estas fechas y momentos especiales.

Cada uno de nosotros es una pieza clave para mitigar este problema, ya que en  la huerta orgánica somos aliados de la naturaleza, promoviendo sus principios, como por ejemplo  el principio de la biodiversidad.

Invitamos a quienes visitan nuestro blog a  concientizar a sus amigos sobre este tema, para seguir disfrutando de lo mejor de nuestro planeta, la madre tierra.

Clasificación  y  Propagación de Aromáticas

Como dijimos en la entrega anterior las plantas aromáticas se destacan por su aroma y/o sabor y esta propiedad se debe a la presencia de  sustancias llamadas esencias o aceites esenciales, presentes en hojas, bulbos, raíces, flores, semillas y frutos.

Según su ciclo de vida las clasificamos en:

• Anuales, son las que  cumplen su ciclo en un año, Ej. Albahaca, Cilantro.
• Bianuales, cumplen su ciclo en dos años, en el primer año producen hojas y en el segundo año florecen, producen semillas y mueren, Ej. Perejil.
• Perennes, son las que viven varios años y en su mayoría son arbustivas y leñosas, Ej. Romero.

Multiplicación o Propagación de Aromáticas

Existen diferentes formas de propagación, por semilla, por división de matas, por estacas, por acodos.

• Multiplicación por semillas. Se usa  para las especies anuales y bianuales, como Albahaca y Perejil, (las especies perennes también se pueden multiplicar por semilla, pero necesitaríamos más tiempo para obtener las plantas).

• Multiplicación por división de matas. En otoño se divide la mata grande en matitas individuales con raíz, tallo y hojas. Ej. Orégano, Ciboulette y Tomillo.

• Multiplicación por estacas. En otoño se toman trozos de tallo de 10 a 15 centímetros, que no estén leñosos y luego se siembran en macetas, en forma individual. Es común en Romero y Lavanda. 

       

• Multiplicación por acodos. Se elige una rama lateral y se entierra sosteniéndola con un alambre tipo horquilla para que la rama quede acostada y en contacto con el suelo. Es característica en la Menta y el Estragón, especies invasoras. 

Recordar:

En nuestra Huerta Orgánica las plantas aromáticas funcionan como un cerco vivo. Se sugiere ubicar a las aromáticas perennes en las cabeceras de los canteros o rodeando a la huerta, mientras que a las anuales y bianuales se las debe intercalar con las hortalizas de la huerta.

Las  Plantas  Aromáticas  en  la  Huerta Orgánica

Cuando planteamos  el tema de la Huerta Orgánica como filosofía de vida, destacamos nuestra función como mediadores para que las plantas  crezcan fuertes y sanas. En base a esto, la  diversidad es un principio que no podemos dejar de aplicar en nuestra huerta y para esto las plantas aromáticas cumplen un papel fundamental.

Definimos como plantas aromáticas a las especies vegetales que se destacan por tener aroma y/o sabor que las hace útiles.

Ellas  atraen a  los enemigos naturales (que controlan o se alimentan de las plagas de la huerta) y además, cuando se encuentran mezcladas en la huerta (ejemplo Romero,  Menta, Tomillo), actúan como repelentes de  plagas.

La gran diversidad de olores y colores crea un ambiente diverso, complejo, que confunde a las plagas y estas demoran más tiempo en encontrar la planta específica de la cual alimentarse, y durante ese tiempo, existen altas posibilidades de que esa plaga sea controlada por su enemigo natural.

Las aromáticas además, nos permiten  elaborar preparados naturales que nos ayudan en  el control de plagas de la huerta.

Por último no debemos olvidar lo importante que es contar con estas plantas para su uso culinario o  para hacer nuestro entorno más agradable.

“Aún cuando el espacio sea limitante, no existen razones para privarnos del placer de tener nuestras propias aromáticas…”

Próximamente continuaremos con la clasificación, propagación y ubicación de especies aromáticas importantes en la Huerta Orgánica.

Factores  que  influyen en el  proceso de Compostaje:

Estos factores inciden en la calidad del producto final y son: la temperatura, la humedad, la aireación, el pH, la relación C/N.

Temperatura. Es un factor que nos indica que el proceso ha comenzado, ya que a partir de aproximadamente 10 días la temperatura comienza a  aumentar (fase termófila), debido a la gran actividad microbiana  de actinomicetes, bacterias y hongos termófilos.  Dado que la temperatura puede llegar a los 70°C, se produce la destrucción de semillas de malezas y microorganismos patógenos. Al final del proceso de compostaje (fase de maduración), la temperatura se mantiene a la temperatura ambiente.

Humedad. Es importante evitar los extremos de humedad, cuando la humedad es baja disminuye la actividad microbiana y cuando es excesiva se producen condiciones de anaerobiosis lo que genera malos olores. La humedad ideal es del 60 %. En la práctica esto se consigue con la humedad de los restos orgánicos a la que habrá que complementar con riegos cuya frecuencia dependerá de la estación del año.

Aireación. La presencia de oxígeno es fundamental ya que el compostaje es un proceso aeróbico, esto lo conseguimos con el volteo de los materiales de la compostera.

pH. Al inicio del proceso el pH puede descender debido a que los microorganismos actúan sobre la materia orgánica presente y liberan ácidos orgánicos. Luego el pH aumenta por la liberación de iones amonio. Ya al final del proceso en la fase de maduración, el pH se mantiene ligeramente alcalino (7-8), debido a la nitrificación (oxidación de iones amonio).

Relación C/N. La relación C/N ideal debe estar entre 25/1 a 30/1 lo que se consigue con una adecuada proporción de materiales entre los que aportan Carbono como hojas secas, aserrín, restos de poda y los que aportan Nitrógeno como cáscaras de frutas y verduras, yerba, té.

Sugerencia para docentes:

La variación que presentan  algunos de estos factores en el proceso de compostaje,  es ideal para que sean tratados e investigados en clase, un ejemplo  son la temperatura (termómetro) y el pH (papel Tornasol o papel pH).