domingo, 4 de junio de 2017

Desde La Huerta y Vos recordamos el día del medio ambiente

Este año el tema es: “Conectar a las personas con la naturaleza”.


Quienes practicamos la experiencia de la Huerta Orgánica somos conscientes de la riqueza incalculable que nos provee la naturaleza, no solamente por el hecho de cultivar nuestros alimentos sino además, por todo lo que nos aporta a nivel espiritual, social, moral…

Desde La Huerta y Vos los invitamos a conectarse con la naturaleza, para tener la oportunidad de disfrutar de sus múltiples beneficios, desde el respeto, la solidaridad y el compromiso para que todos podamos tener ese derecho.


viernes, 12 de mayo de 2017

La  Huerta Comunitaria


Desde nuestro blog queremos invitarlos a conocer  las actividades que se vienen realizando en  la Huerta Orgánica del Barrio Peñarol.

Una huerta de puertas abiertas a todos los vecinos, a padres con sus hijos, a jóvenes, a maestros, a estudiantes.

Una huerta para aprender, para intercambiar  conocimientos, saberes, semillas…


Una experiencia que queremos replicar en más barrios ya que son muchas las personas que se interesan en cultivar sus propios alimentos.


Para visitar la huerta pueden enviarnos correo a: lahuertayvos@gmail.com


domingo, 12 de marzo de 2017

¿Cómo acondicionar la  Huerta en Otoño?



Cuando llega el otoño es como si comenzara el año en la huerta, porque vamos a tener que terminar de cosechar las hortalizas de primavera - verano y comenzar desde cero, es decir desde la preparación de la tierra que servirá de sustrato para los nuevos cultivos.


Los que hemos transitado la experiencia de la Huerta Orgánica sabemos que todo tiempo dedicado a ella es muy beneficioso desde varios aspectos, por eso es que no debemos postergar las sugerencias de manejo para esta época.



martes, 14 de febrero de 2017

El cultivo de Tomates Cherry en la Huerta Orgánica

El tomate Cherry (cuyo nombre científico es Solanum lycopersicum L. var. cerasiforme), pertenece a la familia de las solanáceas junto con el morrón, la papa y las berenjenas.

Es una planta herbácea perenne pero la cultivamos como planta anual ya que la sembramos durante la primavera, continúa su ciclo durante cuatro a seis meses y la eliminamos antes de los primeros fríos por ser un cultivo muy sensible a las bajas temperaturas.

El nombre Cherry se debe a un concepto comercial que refiere a los tomates de menor calibre.

Este cultivo no debería faltar en nuestra huerta en la época estival, debido a sus múltiples beneficios:

Es un cultivo sencillo y de fácil manejo.

Es ideal para una huerta en espacios pequeños como un jardín, terraza, azotea.


Podemos instalarlo en macetas, jardineras, cajones o en algún recipiente que puede estar disponible en nuestro hogar, como bidones.

Las plantas son muy productivas y nos pueden ofrecer una abundante cosecha.


Requerimientos del cultivo

Luz: las plantas son muy exigentes en luz por lo que el lugar que elegimos para el cultivo debe ser muy soleado.

Temperatura: la temperatura óptima para el desarrollo de la planta es de 25° a 35° (primavera-verano).

Sustrato: es importante que la tierra para el cultivo esté mezclada con abono orgánico como compost o humus, para lograr un suelo suelto, liviano y rico en nutrientes. (Será necesario además, el agregado de abono orgánico una vez al mes a lo largo del ciclo del cultivo.)

Riego: es un cultivo exigente en agua por lo que se requiere regar todos los días lentamente y al costado de la planta. (Lo ideal es de tardecita).

¿Cómo iniciamos nuestro cultivo?

Si partimos de la semilla, la podemos sembrar directamente en el lugar definitivo (maceta, cajón, cantero) o realizar un almácigo para obtener nuestros plantines que después serán trasplantados. Otra opción sería comprar los plantines en algún vivero.

Cuando decidimos sembrar semillas de tomates Cherry debemos estar seguros que las mismas corresponden a la especie y variedad que nombramos anteriormente.

En el mes de octubre realizamos la siembra de las semillas. Ver La Siembra en la Huerta Orgánica (Segunda Parte)

Cuando elegimos hacer almácigos de tomate Cherry, los plantines estarán prontos para trasplantar luego de un mes y medio.

Los recipientes en que crecerán las plantas deben ser de tamaño adecuado ya que cada plantita necesitará un espacio de 30 cm de profundidad y 40 cm de diámetro.

Los frutos estarán prontos para cosechar a partir de los dos meses en que se realizó el trasplante.

Cuidados a tener en cuenta durante el desarrollo del cultivo

En veranos muy cálidos, con temperaturas muy elevadas se puede retardar el crecimiento de la planta, por lo que se sugiere colocar una malla de sombra.

Agregar compost o humus de lombriz durante el desarrollo de la planta, esto se debe hacer al costado de la planta con una frecuencia mensual.

Retirar de la planta los brotes axilares que crecen entre el tallo principal y la rama productiva, lo que favorece la formación de flores y frutos.



Retirar de la planta hojas secas o con manchas.

A medida que la planta crece y aparecen los frutos es necesario colocar un tutor para evitar el contacto de los tomates con el suelo.

Se sugiere plantar los tomates asociados a plantas aromáticas como perejil, ciboulette, albahaca, orégano, tomillo.


En la medida que tengamos en cuenta estos cuidados vamos a poder evitar los problemas sanitarios y disfrutar de una cosecha abundante.



miércoles, 1 de febrero de 2017

El cultivo de Frutillas en nuestra Huerta Orgánica

Existen varias razones para incluir este cultivo en la huerta.

Es muy atractivo y apetecible para niños y adultos, por la forma, gusto, color y aroma de sus frutos.

Es un cultivo que lo podemos manejar con facilidad en pequeños espacios utilizando macetas o envases descartables.


La frutilla es uno de los cultivos que a nivel comercial recibe varias aplicaciones de agroquímicos, es por eso que deberíamos aspirar a producir nuestras propias frutillas orgánicas.

Características del cultivo a tener en cuenta
La frutilla es una planta herbácea, perenne, de porte rastrero que pertenece a la familia de las Rosáceas (al igual que algunos frutales como manzana, pera, durazno y plantas ornamentales como los rosales, entre otros).

Si bien es una fruta, técnicamente se la incluye dentro de los cultivos hortícolas por su forma de manejo, al igual que la sandía o el melón.

La parte comestible es en realidad un fruto agregado, formado por un receptáculo muy desarrollado, sobre el que se encuentran los verdaderos frutos llamados aquenios con las semillas expuestas.


Al ser la frutilla una planta híbrida, no la podemos multiplicar por semilla y su propagación se realiza en forma vegetativa por medio de estolones que desarrollan plantas hijas.

¿Cómo iniciamos nuestro cultivo?
Si queremos incluir este cultivo en nuestra huerta tenemos que adquirir nuestras primeras plantas en algún vivero de confianza, la época ideal es al finalizar el invierno (habitualmente las plantas de vivero vienen en pequeñas macetas).


En espacios pequeños podemos instalar las plantas en macetas, bidones, botellas de plástico o incluso en bolsas de polietileno resistente que tengan una profundidad de 20 a 30 cm. Los bidones, botellas o bolsas se pueden perforar simulando lo que sería una maceta frutillera, para luego trasplantar las plantas en cada orificio.


La frutilla requiere de un suelo suelto, liviano, rico en materia orgánica por lo que el sustrato para rellenar las macetas debe tener tierra mezclada con algún abono orgánico como compost o humus de lombriz.

Es importante cubrir el suelo con pasto seco (medida de manejo que siempre sugerimos para la huerta orgánica por las ventajas que brinda) ya que se evita el contacto de las hojas o frutos con el suelo lo que previene problemas de sanidad (hongos en la planta y sobre todo en los frutos).

El riego durante la fructificación (primavera-verano) deberá de ser diario, alejado de las horas de mayor intensidad de luz solar y siempre al costado de la planta sin mojar las hojas. También en esta estación debemos cubrir las plantas con alguna malla de sombra.

Fisiología del cultivo
Dado que la frutilla es una planta perenne debemos conocer cómo se comporta durante las diferentes estaciones del año.

En primavera con el aumento de las horas de luz y de la temperatura, se produce el desarrollo vegetativo de la planta y comienza la floración y la fructificación.

En verano con temperaturas mayores a 28° la planta comienza su desarrollo vegetativo formando estolones.

En otoño con la disminución de las horas de luz y de la temperatura, la planta comienza a detener su crecimiento (acumulando reservas en las raíces).

En invierno con los días cortos y bajas temperaturas se detiene completamente el crecimiento de la planta (la planta acumulará el frío necesario para salir de ese período de latencia).

Sugerencias
Como vimos anteriormente la producción de frutillas para consumo se produce durante la primavera y el verano.

En verano cuando las temperaturas son más altas es común observar la formación de estolones. En este momento podemos decidir dejar algunas plantas con estolones para obtener plantas hijas para nuestra huerta o de lo contrario se podan para favorecer la producción de frutillas.

















En otoño cuando ya culminó la etapa productiva se sugiere sacar las hojas secas o con manchas, restos de frutos o racimos viejos mediante poda con tijera.

En invierno debemos proteger las plantas con polietileno transparente para evitar daños por heladas.