lunes, 29 de febrero de 2016

La  Huerta Orgánica como Herramienta Educativa




En las últimas décadas las huertas orgánicas han formado parte de los espacios de muchos centros educativos, ya que son variadas las posibilidades que ofrece esta herramienta para facilitar el aprendizaje.

Muchos de los temas de los programas de estudio se pueden integrar a las actividades de la huerta facilitando el aprendizaje desde la observación, la curiosidad y el entusiasmo. 

Contar semillas, medir canteros, calcular superficies, calcular volúmenes de tierra, hacer gráficos de evolución de la temperatura diaria, hacer germinadores, observar la importancia de la fotosíntesis en las plantas, la importancia de la lombriz de tierra en las propiedades del suelo, tomar contacto con un vocabulario nuevo relacionado a la huerta, llevar un cuaderno de campo con lo observado y realizar registros fotográficos de la huerta…, son algunas de las posibilidades que nos ofrece.

No hay duda que tener una experiencia de Huerta Orgánica en la escuela o el liceo,  es una oportunidad  que deberían tener todos los niños y jóvenes para:

  • Aprender experimentando, cuestionando, planificando, pero disfrutando.
  • Saber que la huerta orgánica es un ecosistema que se sustenta en ciertos principios, los que vamos a poder comprender y aplicar mediante la observación y la experimentación.
  • Quienes participan de los cuidados y actividades de la huerta forman parte de ese sistema, donde todos dependemos de todos y aprendemos a ser solidarios, pacientes, a ver que podemos pensar diferente, aprendemos a  cuestionar  con argumentos, a trabajar en equipo para buscar soluciones entre todos.
  • Aprendemos a mejorar nuestra autoestima, a cuidarnos, a que merecemos y es posible, comer sano y rico.
  • Aprendemos a proyectar objetivos, a planificar, a trabajar para obtener resultados.
  • Aprendemos que al trabajar junto a la naturaleza, con los seres vivos, con sus colores, aromas, texturas, podemos potenciar nuestros sentidos, sorprendernos más, ser creativos y ofrecer lo mejor de nosotros.

Seguramente deben haber muchos docentes que van a estar de acuerdo…


sábado, 27 de febrero de 2016

La  Huerta Orgánica en un espacio pequeño




El tener un espacio pequeño como un balcón, una terraza, un patio, un jardín, no son condiciones para privarnos de tener al menos, nuestras plantas aromáticas frescas y al alcance de la mano.

Podemos usar desde macetas, jardineras, latas, cajones, envases plásticos, neumáticos y las especies que mejor se adaptarán a estos son las de raíces cortas como lechuga, acelga, espinaca, rabanito, perejil, ciboulette, zanahoria, apio, sin olvidar las aromáticas como orégano, tomillo, albahaca y las florales como copetes o caléndulas por ejemplo.

Además de los cuidados generales que debemos tener en una huerta orgánica, como luz solar cinco horas al día, tierra mezclada con compost o humus, agua en cantidad adecuada evitando los excesos, existen cuidados específicos de este tipo de espacios pequeños:

  • Todos los recipientes usados para cultivar ya sean, macetas, tarros, envases plásticos, deben contar con agujeros de desagüe que en las macetas colgantes deben estar en la base  y en las que se encuentran sobre el piso al costado.
  • En el interior de los recipientes y en la base se sugiere colocar una capa de piedras, como pedregullo para evitar que se obturen los desagües.
  • Cuando el espacio pequeño está muy expuesto, en invierno habrá que cubrir las plantas en la noche con polietileno con tratamiento térmico, resistente a los rayos U.V., y en verano proteger las plantas del sol intenso con una malla de sombra.

martes, 23 de febrero de 2016

La Biodiversidad en la Huerta Orgánica:


Promover la biodiversidad en nuestra Huerta Orgánica implica no sólo referirnos al suelo, sino también a las especies de plantas que vamos a cultivar.

La biodiversidad comprende plantar especies diferentes en el mismo espacio, a esto lo llamamos asociar cultivos  y en diferente tiempo, a lo cual denominamos rotar cultivos.

Hortalizas, flores y aromáticas con diferentes alturas, texturas, colores y aromas crearán un ambiente ideal para atraer enemigos naturales, repeler plagas, optimizar el uso de la luz y de los nutrientes que se encuentran en el suelo. Este tipo de prácticas que imitan a la naturaleza, favorecen el equilibrio de nuestra huerta orgánica y previene de ataques de plagas y enfermedades en las plantas.
La importancia del suelo en la Huerta Orgánica:



La Agricultura Orgánica se sustenta en una serie de principios que surgen de observar pacientemente  los ciclos de la naturaleza para comprenderlos y aplicarlos.

Los ecosistemas (la huerta es uno) se componen de diferentes factores, uno de ellos es el suelo.

El suelo natural es un medio rico en vida, allí podemos encontrar bacterias, hongos, protozoarios, algas, lombrices, como también pequeños insectos y para la agricultura orgánica el suelo es un factor fundamental.

Mediante las prácticas de manejo orgánico, como el agregado de abonos orgánicos al suelo (compost o humus de lombriz), buscamos favorecer la presencia y actividad de los seres vivos que habitan en él, mejorando así las propiedades que lo hacen apto para la agricultura.

El suelo incide en la sanidad de nuestras plantas y en la posibilidad de asegurarnos una buena cosecha.

lunes, 15 de febrero de 2016

La Huerta Orgánica como  Filosofía de Vida


La  Huerta Orgánica es un agro ecosistema artificial, realizado por nosotros, respetando e imitando los ciclos de la naturaleza.

En nuestro planeta la vida está organizada en sistemas definidos y autosuficientes donde existe una relación perfecta entre los animales y las plantas. Partiendo de esto es que nos planteamos: ¿cuál es la función de nosotros, los seres humanos para no interferir en esa relación perfecta? Nosotros debemos crear las condiciones más naturales posibles y en la medida que lo logremos, nuestra función será la de ser mediadores para que las plantas crezcan sanas.

Todos los seres vivos que habitan nuestro planeta viven en un mundo de mutua ayuda, todos cumplen una función dónde unos producen alimentos y energía para otros. Desde las estructuras más simples hasta las más complejas, todos viven en una relación perfecta y nosotros, deberíamos comportarnos de la misma manera.

En esto se basa la Filosofía de Vida de la Agricultura Orgánica, es por esto que en ella fomentamos por ejemplo, la diversidad de especies que permiten lograr el equilibrio de nuestro agro ecosistema orgánico, es decir nuestra huerta.

Esta forma de apreciar la vida en sus diferentes formas, nos permitirá sentirnos en armonía con nuestro entorno y más cerca de la naturaleza para apreciarla y respetarla, lo que va de la mano con ciertos valores que deberíamos fomentar para compartir entre todos.

domingo, 14 de febrero de 2016

Elementos  que no deben faltar en una huerta:


Cuando decidimos tener una huerta, tenemos que considerar que será un lugar de experimentación, recreación y placer.

Allí, aplicaremos diferentes  técnicas, dónde cada uno seleccionará la que más le resulte de acuerdo a su espacio y preferencias.

Los elementos que no pueden faltar y que son la base para asegurar un buen resultado, surgen de observar, imitar y aplicar lo que hace la naturaleza. Ellos son:
  • Luz, las plantas necesitan la luz directa del sol al menos durante 5 horas al día.
  • Tierra de buena calidad, con  buen contenido en materia orgánica, liviana, de textura y estructura adecuada (estas propiedades se obtienen mezclando la tierra con compost o humus de lombriz).
  • Agua en cantidad adecuada, recordando que el exceso de agua puede ser irreversible.
  • Recipientes adecuados. Si tenemos un espacio pequeño, los recipientes deben tener una profundidad adecuada de al menos 30 centímetros y con buenos desagües.
  • Semillas de calidad, de origen conocido, que no estén vencidas y que correspondan a la época en que vamos a plantar.
  • Diversidad, además de hortalizas no deben faltar las flores y plantas aromáticas.

Si estamos motivados y deseamos tener una huerta, no habrá ninguna razón que lo impida, siempre que tengamos en cuenta estos elementos y algunos cuidados que dependen de la estación del año.

jueves, 4 de febrero de 2016

Beneficios de tener una huerta:

Cada uno de nosotros puede tener diferentes razones para tener una huerta, pero para los que aún no tomaron la decisión, recordaremos que es lo que nos ofrece:



  • Alimentos frescos, nutritivos, cosechados en el momento en que los vamos a consumir.
  • Mejora los hábitos de alimentación en niños y jóvenes, ya que los incentiva a consumir lo que ellos producen.
  • Desarrolla valores, al tomar contacto con los ciclos de la naturaleza, con sus tiempos y necesidades, esta experiencia permite desarrollar la paciencia, la responsabilidad, la solidaridad, la capacidad de investigar y cuestionar.
  • Ahorra recursos, ya sea por no tener que comprar lo que producimos, como por el aporte que hacemos al medio ambiente debido a que las plantas captan el anhídrido carbónico del aire (gas que contribuye al efecto invernadero) y por el uso de abonos orgánicos (producidos en la huerta) que aportan materia orgánica al suelo.
  • Embellece y alegra el entorno, a la vez que permite crear un lugar de disfrute y tranquilidad dónde nos sentimos plenos.


Estas son algunas de las razones que hacen que este tipo de experiencia  sea ideal para niños, jóvenes y adultos mayores.

martes, 2 de febrero de 2016

Bienvenidos a La Huerta y vos.

Son muchas las  personas que desean tener o tienen su propia huerta.

Acá se van a presentar sugerencias para armar una huerta orgánica, se compartirán experiencias y  se tratarán temas vinculados a los problemas ambientales actuales.

Para poder seguir disfrutando de lo que nos ofrece la naturaleza, vamos a tener que comprender cuales son las leyes que la rigen y así, poder aplicarlas.

Están invitados a participar.